- Alcanfor: Efecto refrescante, calmante y regulador de la secreción sebácea.
- Ácido salicílico: Propiedades antibacterianas. Trata las bacterias que aparecen cuando se trata de una piel con impurezas o con exceso de sebo, eliminándolas y evitando así la formación de nuevo acné.
- Rostro: Empapo un algodón con ACNOSÁN y lo aplico directamente en los granitos de forma localizada, sin pasarlo por el resto del rostro. Esto siempre lo hago por la noche y solamente cuando hay algún granito a tratar (por eso un bote me dura unos 6 meses aproximadamente).
- Espalda: Hago un spray casero con un tónico de caléndula, proporción 50 - 50. Es decir, mitad de la botella de spray de tónico de caléndula (pongo este de AQUÍ) y la otra mitad de la botella, la lleno de ACNOSÁN. Lo mezclo todo y me vaporizo la espalda después de secarme al salir de la ducha.