Cómo me gustan los domingos... y es que las #potiduchas me hacen tantísima falta... relajarse, dejar la mente en blanco, relajar el cuerpo completamente y echar a volar olfato y vista (velas, oscuridad...).
Salgo nueva. Son momentos míos, momentos que necesito sí o sí. Antes me duchaba rápido y arreando porque siempre iba con prisa. Ahora sigo con prisa (igual o más que antes), pero cuando tengo un día libre, es algo que hago fijo porque siento que lo necesito y que me ayuda física y mentalmente.
No se trata de lavarse y ya está; se trata de una experiencia y de dejar disfrutar a tus sentidos con diferentes texturas, olores... De eso se trata en cierto modo el relax al fin y al cabo ;) Concéntrate solamente en ese toque de mango dulce esta vez... y relájate...